la noche nos devora, en invierno
que cada día, un minuto antes la
oscuridad se cierne sobre
nosotros y
los temores y los ardores
llegan antes.
la noche nos devora, en invierno
y las esperanzas se
enternecen
y los cuerpos se
estremecen ante
tanta soledad tan oscura
por la frialdad de diciembre
y la escasez de enero
y la tristeza de febrero.